“Pedro Calderón de la Barca; España y sus valores”.

El pasado día 6 de mayo, dentro del programa formativo de la academia tuvo lugar en el salón de actos del acuartelamiento "General Shelly", la conferencia titulada Pedro Calderón de la Barca; España y sus valores, del ciclo: "Cátedra Teniente General Amat". Fue impartida por el coronel de Artillería de la reserva Ignacio Sarmiento Caballero.

A la conferencia asistieron varios mandos de la ACAB y los alumnos de la EMIES, así como miembros de la Asociación.

Realizó la presentación del ponente el teniente coronel Calabia Álvarez, del departamento de Ciencias Jurídicas y Sociales de la academia, quien resaltó su trayectoria militar y que hizo especial mención de su actual labor de divulgador y creador de contenidos relacionados con la Historia a través del canal de Youtube La Mecedora; destacó además sus trabajos de colaboración con el Instituto de Historia y Cultura Militar

A continuación, tomó la palabra el ponente para agradecer la misma y explicar que la conferencia se encuadra dentro de la efeméride que conmemora el Ejército de Tierra en el presenta año con el título: De Pavía a Breda (1525-1625) 100 años de preeminencia de los Tercios Españoles en Europa, para resaltar la figura de Pedro Calderón de la Barca en el contexto del Siglo de Oro Español.

Tras este preámbulo, expuso las líneas de la conferencia que se basaría en la figura de Calderón como soldado y en el origen y razón del verso que forma parte de su obra teatral: Para vencer a amor, querer vencerle y que pone en boca del protagonista principal Cesar Colona, maestre de campo, en uno de sus lances.

Tras este inicial preámbulo, el conferenciante indicó que la razón de la exposición se debe a la importancia de los valores, haciendo referencia a una sensación permanente de pérdida de éstos, por lo que se interrogaba si realmente existe actualmente una crisis de los mismos.

A continuación, realizó un repaso partiendo de los fondos epigráficos mesopotámicos y para intentar aclarar que son los valores, para lo que hizo referencia a la definición de la Real Academia Española: Normas que guían la forma de actuar, ser y pensar de los individuos y las sociedades, con el fin de remarcar la importancia del valor en su categoría de "cualidad de ánimo" y definirlo como guía personal y en especial de los militares.

Expuso que, en sus propios inicios como militar, el texto de Calderón le sirvió como guía continua a lo largo de su carrera y que permanecía como poso continuo en su memoria; como prueba de ello, recitó los versos anteriormente reproducidos.

Continuó con la descripción del desarrollo vital de Pedro Calderón, para lo que hizo referencia a su condición de soldado, literato y sacerdote y, tras un breve recorrido en su formación de las Universidades de Alcalá de Henares y Salamanca, donde se vio envuelto en una serie de sucesos delictivos, renunció temporalmente a su condición de clérigo para iniciar su periplo como literato, que le llevó a publicar en 1623: Amor, honor y poder, donde ya desarrollaba el problema del honor.

Como soldado, le situó entre 1623 y 1625 y en los Tercios de Flandes, trayectoria vital que reflejó en su comedia El sitio de Breda, del que fue testigo, por lo que pudo presenciar la rendición de la plaza, expresada por su octava del mismo título.

Tras su estancia en Flandes, regresó a España como literario, siendo nombrado por Felipe IV caballero de la Orden de Santiago. En 1638 y tras la invasión francesa, regresó al ejército, vicisitud que le permitió escribir Sitio y socorro de Fuenterrabía. Participó además en la campaña de Cataluña de 1640, tras la rebelión del "Corpus de Sangre" y posterior invasión francesa; estaba entonces encuadrado en una compañía de caballos-coraza de los Tercios. El conferenciante resaltó entonces la condición de Calderón de que era soldado de Caballería. Y como tal, participó en la carga de la Caballería terciana en la batalla de Lérida (1642).

Por fin, se ordenó sacerdote en 1650, lo que hizo que su quehacer literario derivara a los conocidos "Autos Sacramentales". A partir de este cambio radical, el conferenciante explicó el trasfondo del verso calderoniano: nada se hereda, todo se gana con los actos, que debe constituir un principio básico de la sociedad militar. El coronel Sarmiento desgranó a continuación las diferentes partes del verso de Calderón para poner en valor su actualidad como conjunto de valores militares.

• En: Este ejército que ves, vago al yelo y al calor, … resaltaba a la capacidad de acción en cualquier ambiente, manifestación del "espíritu de sacrifico"

• … la república mejor y más política es del mundo ... que describía la participación del militar en el seno de un estamento permanente que proporcionaba igualdad de oportunidades. El ponente contó entonces que la bandera roja y gualda fue utilizaba en combate por primera vez en el Ejército de Tierra por el Batallón de Cazadores de Fernando VII el 10 de junio de 1808, durante el asedio a Valencia de las tropas napoleónicas, al mando de Moncey.

• … en que nadie espere que ser preferido pueda por la nobleza que hereda, sino por la que el adquiere; porque aquí a la sangre excede el lugar que uno se hace y sin mirar cómo nace se mira como procede… Este texto expresa el valor de la promoción por los hechos; para completarlo, puso el conferenciante el ejemplo del cabo Nicolás Moreno Camero, quien en la acción de Taxdir (20 de septiembre de 1909), fue acreedor, junto al coronel Cavalcanti de la Laureada de San Fernando. Alcanzó posteriormente el grado de general.

• …. Aquí la necesidad no es infamia; y si es honrado, pobre y desnudo un soldado tiene mejor cualidad que el más galán y lucido; porque aquí a lo que sospecho no adorna el vestido el pecho que el pecho adorna al vestido… Al igual que en el anterior, reseñó el valor de los hechos por encima del aspecto y la cuna, poniendo como ejemplos los de Ana María de Soto y de Francisca Guarch, quienes ocultaron su condición de mujer para servir en la Infantería de Marina (1793) y en las fuerzas carlistas (1873) respectivamente; demostraron un valor extraordinario en el combate, atribuido normalmente en exclusiva a la condición masculina.

• · ... Y así de modestia llenos, a los más viejos verás tratando de ser lo más y de lo menos… En este párrafoel ponente destacó la importancia del soldado veterano en su actuación con los bisoños y, por ende, de los mandos sobre sus subalternos, cono fuente de experiencia e inspiración de valor en el combate. Como apoyo mostró un corte de la película "Alatriste" (2006) de Agustín Diaz Yanes, basada en la novela de Arturo Pérez Reverte: "El Capitán Alatriste"; es en el momento que, ante la carga de la caballería francesa, el Maestre de Campo ordenaba: soldados antiguos ¡a vanguardia! Y cómo el citado capitán, ante la inminencia del fatal destino, ordenaba a su pupilo, Iñigo de Balboa, que se colocase a retaguardia.

• Aquí la más principal hazaña es obedecer, y el modo cómo ha de ser es ni pedir ni rehusar…Esta frase, muy conocida y publicada en la práctica totalidad de las paredes de los acuartelamientos, como expresión de la virtud de la disciplina, la refrendó con el artículo VII del Decálogo del Cadete:

• … Aquí, en fin, la cortesía, el buen trato, la verdad, la firmeza, la lealtad, … El ponente remarcó la verdad como seña de identidad y la firmeza y la lealtad como compromiso personal.

• … el honor, la bizarría, el crédito, la opinión, la constancia, la paciencia, la humildad y la obediencia… Como ejemplo de las virtudes reflejadas en el verso, citó al teniente José Luis Monterde Maldonado, que, cumplimiento de una misión de la ONU en Bosnia (1993), protegió, con riesgo de la suya y de los hombres y mujeres de su unidad, la vida de 210 civiles croatas, frente a la amenaza de un grupo de combate bosnio, conocido con el nombre de los Cisnes Negros. Evitó así su intención de provocar un acto claramente genocida.

• · … fama, honor y vida son caudal de pobres soldados; que en buena o mala fortuna la milicia no es más que una religión de hombres honrados… En este final del verso, insistió el ponente en que lo importante no son las recompensas, sino la fidelidad a los valores.

Antes de poner fin a su exposición, recalcó que los valores tienen una presencia en el Ejército que son consecuencia directa de los valores innatos de los españoles. Estos valores se han actualizado mediante la publicación precisa de la tarjeta: Valores, cuyo contenido, en gran medida, está inspirado en el verso objeto de la conferencia.

Como colofón, expuso un fragmento de la pieza lírica de las Corsarias, mediante video, como fondo musical de la representación de la Zarzuela "Cádiz" del maestro Chueca el 20 de noviembre de 1886. Terminó recomendando a los alumnos presentes a recurrir a la música militar como fuente de ánimo en los momentos de dificultad.